Este colectivo se concentra frente a hospitales de toda España para pedir su homologación como grado universitario y su inclusión en el grupo B. Reclaman un mayor reconocimiento a su labor dentro del sistema.

Técnicos superiores sanitarios se concentran frente a hospitales de toda España, también en Aragón. En los carteles exhibidos este jueves por la mañana en las escaleras de acceso al Clínico de Zaragoza aparecían mensajes alusivos a la homologación del título como grado universitario o mejoras retributivas e inclusión en el grado B. Las quejas van también dirigidas a exigir un mayor reconocimiento de su labor dentro del sistema sanitario.
«Existe un gran desconocimiento sobre nuestra profesión y a menudo se cree que nuestro trabajo lo realizan otros profesionales sanitarios», reconocen: «Y no, no somos médicos, ni enfermeras, ni TCAE. Somos técnicos superiores sanitarios».
Cuál es la función de los técnicos superiores sanitarios
Muchas y muy variadas: «Realizamos el análisis y procesamiento de todas las muestras humanas que se extraen a los pacientes ya sea sangre, orina u otros líquidos biológicos incluyendo determinaciones complejas a nivel de genética y biología molecular. Aislamos y determinamos los patógenos en la infecciones y somos quienes preparamos los componentes sanguíneos previos a las transfusiones y los que realizamos las pruebas de compatibilidad entre pacientes previas a un trasplante».
Estos profesionales se encargan también de procesar las muestras de origen citológico y biopsias, extirpaciones y pruebas de inmunohistoquímica y microscopia electrónica. Además de encargarse de hacer todas las pruebas de imagen, como radiografías, mamografías, ecografías y de medicina nuclear (TAC, resonancias…) así como las gammagrafías óseas, pruebas para el tiroides y la prueba del ganglio centinela en el cáncer de mama.
«Los técnicos superiores sanitarios somos los encargados de administrar las radiaciones (radioterapia) para tratar enfermedades como el cáncer, manejando equipos complejos en estrecha colaboración con médicos, físicos y otros miembros del equipo de oncológica. También utilizamos tecnología como la tomografía para crear imágenes del tumor y poder tratarlo después más certeramente», detallan.
Son los que manejan, explican, la codificación clínica y la gestión de archivos e historia, informes de alta y gestión para procesos judiciales y periciales en la actividad de los servicios sanitarios. Todas estas funciones, además de otras que realizan estos profesionales, «ayuda a los médicos a dar un diagnóstico, pues el 85% de estos se realizan en base a estas pruebas».
¿Por qué protestan los técnicos superiores sanitarios de Aragón?
Este colectivo ha salido a la calle para decir «basta ya». «Nos sentimos menospreciados», señalan: «Así se plasma una vez más en la indiferencia con que se nos trata en el borrador de la nueva ley del Estatuto Marco que se está elaborando en estos momentos, pareciendo que no es necesario contar con nosotros como con el resto de profesionales sanitarios, ninguneándonos como si fuésemos prescindibles».
«En 2007 en el Estatuto Básico del Empleado Público (EBEP) se nos clasifica en un nuevo grupo creado exclusivamente para los titulados superiores de Formación Profesional, el grupo B. Llevamos 18 años esperando a que se materialice, nos lo reconozcan y remuneren, pero a día de hoy no lo han hecho».
«No constituimos un grupo de presión tan numeroso como otras profesiones sanitarias pero realizamos funciones tan importantes e imprescindibles como las suyas y estamos dispuestos a continuar con las movilizaciones necesarias y hacer uso, de ser necesario, de las demás posibilidades de acción que nos otorgan las leyes». De hecho, frente al Clínico se han convocado protestas el 25 de febrero, los días 6 y 18 de marzo y el 3 de abril.
Reclaman la equiparación con Europa
Este colectivo exige que la profesión sea grado universitario como en el resto de todos los países de la Unión Europea: «Y debe de contemplarse de una forma u otra en el nuevo Estatuto Marco como ya lo incluía la disposición transitoria 3 de la LOPS (2003), que recogía que nuestras enseñanzas se tenían que adaptar al Espacio Europeo de Educación Superior, efectuándose de esta manera nuestra reconversión desde la Formación Profesional al ámbito universitario».
«Mientras eso no sea así seguimos en inferioridad de condiciones con cualquier técnico superior sanitario de la Unión Europea, ya que se nos impide con nuestra clasificación trabajar fuera de España al no ser considerados Grado Universitarios», reconocen.